Agradecimiento y abundancia
Para tener una vida próspera y en la que reine la abundancia solo has de dar las gracias. Te comparto cómo lo hago yo.
PLENITUD
Carmen Pombero
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A menudo se nos olvida dar las gracias. En nuestra vida diaria, no somos lo bastante agradecidas con las personas que nos prestan un servicio, como atendernos en una tienda o en un bar. Tampoco sonreímos a las personas que nos dan las gracias o simplemente con las que nos cruzamos.
Parecerá una tontería pero no ser amable ni agradecida enturbia nuestra vida y empeora nuestros estados de ánimo, además de generar en torno a nosotras un campo energético pobre y negativo. Si tomamos la sana costumbre de sonreír y ser amables, recordemos que este y el de ser agradecidas forman parte de los cinco principios del Reiki Usui, nuestra vida cambiará notablemente.
Al sonreír a los demás, la sonrisa nos será devuelta y nuestro campo energético se revitalizará y positivará. Nos sentiremos más felices y por lo tanto capaces de afrontar de otra forma nuestro día a día. Nos sentiremos apreciadas y eso ayudará a elevar nuestra autoestima.
En cuanto al agradecimiento diario, incluso a los contratiempos y reveses de la vida, ser agradecidas nos traerá la abundancia. Es la Ley de Atracción que tanto han promulgado desde los budistas hasta Wallace Wattles en La ciencia de hacerse rico o la reinterpretación de sus principios que hizo en El secreto Rhonda Byrne. Hay múltiples formas de dar las gracias y aunque estos libros te darán ejemplos de muchas de ellas (yo las puse en práctica y me funcionó), yo te diré cuál es la mía.
Todas las mañanas lo primero que hago es agradecer el comienzo de un nuevo día lleno de oportunidades y posibilidades. Después de mis ejercicios de meditación, pilates y Reiki, desayuno. Tras esto, me mando un correo electrónico en el que doy las gracias por aquello que quiero que suceda como si ya hubiese ocurrido. Le doy las gracias al Universo varias veces y desde el corazón y en el asunto del correo escribo "Gracias".
El siguiente correo que me envío lo titulo Pensamiento Positivo y es una larga lista de las cosas por las que doy gracias. También lo hago desde el corazón y cada frase comienza con una forma distinta de agradecer (gracias infinitas, estoy enormemente agradecida, mi mayor agradecimiento...) A partir de ahí, la lista es muy amplia. Doy las gracias por mi hijo, por mi marido, por mis amistades, por mis trabajos, por mi ayuda humanitaria. La lista se va ampliando conforme me suceden cosas en la vida. Oportunidades, aprendizajes, doy las gracias por la espiritualidad que crece en mí día a día e incluso por las cosas que aún no han sucedido en este plano.
Para terminar, afirmo mi agradecimiento por sentir mi presente lleno de nuevos caminos de crecimiento y de oportunidades. Mi éxito sé que está asegurado y los reconocimientos, riquezas que gano son la recompensa de mis logros. Agradezco que mi poder espiritual se deba a la ley del menor esfuerzo, como amor incondicional, superación personal, y capacidad de liderazgo, naturalmente y sin voluntad.
Las últimas frases son afirmaciones en las que me digo que tengo la certeza de que estoy a la altura de mis potenciales y por ello mi determinación, valor y predisposición al cambio hacen que alcance mis metas espirituales. Mi mayor agradecimiento es por ser una creadora de realidades, una buscadora de objetivos, una puerta a las posibilidades, por ser una persona querida y feliz que siembra el agradecimiento y el amor.
Estos correos que me escribo y envío cada mañana permanecen todo el día en mi bandeja de entrada y varias veces los leo para recordármelo y cambiar mi pensamiento hacia uno en el que reine el amor, el positivismo y el agradecimiento.
Desde que hago esta práctica todas las cosas que me suceden son maravillosas, porque aunque a ojos de otras personas puedan resultar contratiempos, para mí son una fuente de aprendizaje y experiencia que me fortalecen. Mi ánimo es optimista y me siento radiante y feliz por llevar la vida que quiero y que todo cuanto deseo sucederá porque ya lo hace en otro plano.
Pruébalo o encuentra tu propio método de agredecer para que la abundancia reine en tu vida.